¿Qué caracteriza a la educación en igualdad?
Características[editar | editar código]
Si en el área rural o urbana una niña le dijera que quiere continuar estudiando la secundaria o incluso la universidad, ¿qué le diría?, ¿qué obstáculos cree que encontraría?, ¿cómo abordaría el tema con su familia? Y si una niña le compartiera que de mayor le gustaría ser electricista, carpintera, mecánica o alcaldesa, ¿qué le diría?, ¿cómo la orientaría?, ¿qué tipo de obstáculos cree que encontraría para lograrlo?, ¿qué ventajas podría encontrar?, ¿qué cree que dirían las personas de su comunidad? Si un niño le dijera que quiere formarse para trabajar como peluquero, cocinero o en corte y confección, ¿qué le diría?, ¿cómo lo orientaría?, ¿qué tipo de obstáculos cree que encontraría para lograrlo?, ¿qué ventajas podría encontrar?, ¿qué cree que dirían las personas de su comunidad?
Incorporar la educación en igualdad en las aulas es todo un reto. El sistema educativo está regido por una ley de educación que dice que todas las personas son iguales y deben tener el mismo derecho a recibir educación. Sin embargo, formamos parte de un sistema que conserva valores y visiones tradicionales del mundo, a veces discriminatorios, que generan desigualdad. Por ejemplo, muchas familias numerosas, cuando no pueden mandar a estudiar a todos sus hijos e hijas, priorizan la oportunidad de dar estudios a los hombres. Otro ejemplo es que se sigue considerando que los niños están mejor dotados para las ciencias y las matemáticas y les interesan los deportes, mientras que a las niñas les interesan las materias más sociales y tienen la obligación del cuidado y de ayudar en las tareas del hogar. Así, aunque el marco jurídico de Guatemala establezca un sistema educativo que debe promover la igualdad, en la práctica no siempre sucede.
La educación en igualdad:
- Convierte el contexto educativo en un espacio que pone en valor la diversidad de la población infantil, reconociendo la riqueza de los aportes y los valores de ellas y de ellos. No hay lugar para la desigualdad o la discriminación.
- Utiliza los valores positivos tradicionales, no asignándolos a unos o a otras en función de su sexo, sino que puedan ser asumidos por cualquiera.
- Su objetivo es que las niñas y los niños puedan “aprender a ser” en libertad, sin barreras, ni restricciones culturales y sociales que fomenten la desigualdad entre hombres y mujeres. Para ello, hay que poder cuestionar lo tradicionalmente aprendido como dominante y analizar en el entorno educativo esas barreras para desmontarlas.
- Incorpora la historia, valores y referentes de las mujeres, valorando sus aportes.
- Da importancia a la afectividad y a la sexualidad desde un enfoque multidimensional, basado en la convivencia pacífica y en el desarrollo integral de las personas.
- Es un proceso de cuestionamiento y de análisis de la práctica educativa, de cómo el personal docente, enseña, guía, orienta, acompaña y con qué finalidad lo hace. No pretende ser una nueva materia, sino que el enfoque de educación en igualdad atraviesa todas as áreas curriculares y la vida del centro educativo.
- Implica aprender y desarrollar competencias, habilidades y valores que permitan al conjunto del estudiantado, no importando su sexo, formar parte y participar en su comunidad y en su sociedad, para que sean personas capaces de adaptarse a las demandas de un mundo cambiante.
- Es importante que la educación en igualdad no sea solo un tema del centro educativo, sino que se involucre en la transformación social a toda la comunidad educativa, es decir, docentes, personal no docente, estudiantes, especialmente a las madres y padres de familia.
- Busca que todo el estudiantado tenga las mismas oportunidades para tomar decisiones y construir su plan de vida.
¿Es lo mismo educación en igualdad que escuela mixta?[editar | editar código]
¿Cómo era la escuela en tiempos de sus abuelas y abuelos?, ¿iban ambos a la escuela?, ¿estudiaban las mismas materias?, ¿cuáles eran las expectativas que tenían para su futuro?, ¿ha habido cambios en la educación que recibían las niñas y niños de esos tiempos y la que se imparte en la actualidad?
En tiempos pasados se optaba por contar con una asignatura diferenciada para hombres y mujeres. Ellos cursaban artes industriales en el nivel de educación media y ciclo básico; ellas, educación para el hogar. Esto tiene que ver con los papeles que desempeñarían en la sociedad; los de ellos, proveer en el hogar y participar en la vida pública y los de ellas, dedicarse a las labores del hogar y la crianza. Luego, esto cambió con la actualización del Currículo Nacional Base (CNB) y actualmente se imparte la materia de productividad y desarrollo tanto a niñas como a niños.
El hecho de que niños y niñas estudien en el mismo salón no es suficiente para garantizar la igualdad, tampoco lo es el que ambos estudien la materia de productividad y desarrollo; por ello, surge el modelo de educación en igualdad. Este modelo analiza el sexismo y la discriminación dentro de la práctica educativa y propone medidas para corregirla y orientarla hacia la igualdad, propiciando una mayor participación de las niñas en todos los ámbitos de la vida.
¿Qué pretende la educación en igualdad?[editar | editar código]
¿Cree que la educación en igualdad consiste en que las niñas hagan las mismas cosas que los niños?
La educación en igualdad no busca distinguir qué comportamientos y valores son propios de niños o de niñas, sino ofrecer todo el menú de oportunidades para que sean ellas y ellos mismos los que elijan las opciones que mejor se adapten a sus necesidades e intereses, sin importar su sexo. Observar a sus estudiantes y conocer qué les interesa y para qué son talentosos, le puede dar muchas pistas sobre cómo reforzar sus fortalezas o estimular que conozcan nuevos campos.
La educación debe permitir a las niñas, niños y adolescentes desarrollar al máximo sus capacidades, sin que modelos sexistas los discriminen o limiten su crecimiento como personas independientes. Debe favorecer un desarrollo integral que incluya sus emociones, la expresión de la afectividad, relacionarse de forma pacífica y la comprensión de la sexualidad.
Las aulas son espacios de aprendizaje y de encuentro donde las y los estudiantes intercambian experiencias de la vida cotidiana y aprenden a convivir de forma pacífica. Por ello, la educación en igualdad debe ser transversal en el proceso educativo. Si está presente en la práctica docente, en el currículo, en el planteamiento de los contenidos, en los espacios, en el lenguaje, en los materiales y en el aprendizaje de actitudes y valores, se estará preparando a los estudiantes para participar en la sociedad en igualdad de condiciones.
Elija un cuento tradicional y reescríbalo de modo que varíen los roles de género tradicionales atribuidos a sus personajes. Por ejemplo, ¿qué tal una princesa que sea una apasionada de la mecánica y que pueda arreglar su carruaje si se estropea de camino al baile?, ¿o que sepa karate?, ¿o un príncipe al que no le gusta luchar, sino dialogar para arreglar los conflictos y que no le importa que la princesa le salve la vida cada cierto tiempo? Piense en el Popol Wuj, ¿cómo se podrían reformular las historias para que sus personajes muestren valores de igualdad en situaciones actuales? Con sus estudiantes puede leer tanto la versión original como la reescrita y trabajar juntos para localizar las diferencias y reflexionar sobre los cambios realizados.
¿Cómo toma vida el currículum en el aula?[editar | editar código]
¿Cómo cree que se transmiten los roles de género en el currículo escolar?, ¿dónde se pueden detectar?
El currículo explícito es todo aquello que establece el Currículo Nacional Base (CNB) y cómo el personal docente lo transmite al estudiantado. Por ejemplo, hay un diseño curricular establecido por el Ministerio de Educación, un programa de cada área curricular, una definición de competencias, tareas, procedimientos y evaluaciones que se deben trabajar en el centro educativo.
El currículo oculto es todo aquello que el estudiantado aprende de las personas que hacen parte de la comunidad educativa, en especial del personal docente, sin que tengan intención de enseñárselo. Por ejemplo, formas de expresarnos, valores y actitudes.
Es en este dónde se encuentran en mayor medida manifestaciones del sexismo y otros tipos de discriminaciones. Para comprenderlo mejor vean algunos ejemplos:
- Normativas y rutinas de los centros escolares. Por ejemplo, ¿quién se encarga del orden y de la limpieza en el aula?
- Uso de los espacios de juego. Por ejemplo, ¿quién usa mayor espacio del patio en el desarrollo de sus juegos?
- En los ejemplos y tareas que se desarrollan dentro de las áreas curriculares. Por ejemplo, cuando en un problema de matemáticas hablan de que alguien va a comprar al mercado 10 peras ¿quién suele ser ese alguien?
- Referentes académicos. Por ejemplo, cuando hablan al estudiantado de personas que realizaron aportes importantes a las ciencias, la literatura o el arte, ¿usan más ejemplos de mujeres o de hombres?
- En la participación ciudadana de los Cocode que conoce, ¿hay más líderes o lideresas?
Realice un juego de roles con sus estudiantes en el que, por grupos, ellas y ellos deberán hacer el papel de docentes, organizar responsabilidades y tareas en el aula, resolver quien de sus compañeros realizará tareas como el orden y la limpieza, hablar con sus compañeros sobre qué les gustaría ser cuando sean mayores y poner referentes de oficios y emprendimientos que conozcan. Después, el personal docente deberá reflexionar con sus estudiantes sobre si hubo estereotipos de género o no.
¿Cómo poner en práctica la educación en igualdad?[editar | editar código]
Realice una pequeña lluvia de ideas, ¿qué habilidades debe desarrollar el personal docente para educar en igualdad?
- Conocer a sus estudiantes
Desde el momento en que usted reconoce que todas las personas son diferentes, con distintas experiencias, necesidades e intereses, a través de la lente de la educación en igualdad puede detectar situaciones de desigualdad y de discriminación. Esto también le sirve para fomentar que los estudiantes tomen decisiones sobre su plan de vida sin que sus opciones se vean limitadas por su sexo. - El aula como espacio de convivencia
Las aulas deben ser espacios seguros donde cada estudiante pueda aprender y desarrollarse en libertad e igualdad. También deben ser lugares para aprender a relacionarse con los demás y reconocer el valor de los otros y de las otras, la riqueza de la diferencia y la diversidad. Esto puede lograrse con actividades que permitan al estudiantado compartir historias y motivaciones de su vida cotidiana. Además, estos espacios de diálogo se pueden utilizar para establecer acuerdos y que el funcionamiento del aula sea más equitativo. Otra actividad que fomenta la convivencia son los proyectos de investigación en equipo y las tareas cooperativas.
Una actividad para que el aula se convierta en espacio de convivencia es realizar periódicamente asambleas con el estudiantado. En ellas, niños y niñas elegirán un tema que les interese o les preocupe sobre la vida en el centro educativo para conversarlo conjuntamente. Se debe procurar que niños y niñas se alternen en la elección de los temas de modo que puedan proponer por igual. La labor del personal docente será reflexionar con niños y niñas formas para elaborar propuestas de convivencia pacífica e igualdad de género.
En esta actividad es fundamental trabajar valores como el respeto o la escucha activa. Por ejemplo, un tema puede ser la limpieza en el aula. El docente deberá guiar la reflexión sobre cuáles son las actividades en las que más se ensucia, por qué, cómo podrían colaborar todos y todas para mantener limpia el aula, etc. Después, con los aportes de niños y niñas, el docente elaborará un mural para colgar en la pared del aula las propuestas consensuadas. Las niñas y los niños pueden apoyar en su redacción.
- Aprender a escuchar y a expresarse
Trabajar en grupos, en rincones de aprendizaje o debatiendo en círculo fomenta las relaciones horizontales. Para ello se debe propiciar que todos los integrantes del grupo tengan la oportunidad de hablar y de expresar su opinión. Todas las intervenciones deben ser abordadas desde el respeto y se debe poner en práctica la escucha activa. Es decir, escuchar poniendo atención a lo que está contando la otra persona, mostrando interés, respeto, empatía y no interrumpiendo ni dando consejos que no se hayan pedido.
Es importante fomentar el cuidado y las relaciones de apoyo mutuo entre el estudiantado que, si bien han sido vistos como valores femeninos, tanto niños como niñas deberían incorporar a su forma de relacionarse. Esto implica pensar en que es responsabilidad de todos cuidar lo que se hace, limpiar después de trabajar y preparar los materiales que se van a necesitar.
Una actividad para fomentar el aprender a escuchar, a expresarse y poner en valor el cuidado a otras personas es formar un equipo de acompañantes para estudiantes nuevos que no hablen bien el idioma español, que tengan alguna particularidad o condición que hace beneficioso que reciban el apoyo del grupo. El acompañamiento debe estar guiado por el personal docente. Otro ejemplo de actividad sería formar estudiantes como mediadores de conflictos de modo que, cuando hay algún conflicto entre estudiantes, sea la persona mediadora la encargada de actuar y ayudar a resolverlos poniendo en valor la convivencia pacífica y la igualdad. ¿Se le ocurren otros ejemplos?
- Historia, participación y aportes de las mujeres
En cualquier área curricular deben incorporar referentes tanto masculinos como femeninos pues es importante mostrar distintos modelos de ser hombre y de ser mujer. Para lograr una situación de equidad, el estudiantado debe conocer los aportes de las mujeres a todas las áreas de conocimiento, incorporando a las áreas curriculares nombres y logros de científicas, literatas, artistas, políticas, etc.
Tome conciencia de sus propios conocimientos, ¿conoce los nombres de las mujeres que participaron en el movimiento de independencia de Guatemala?, ¿conoce el de las ingenieras guatemaltecas que están trabajando en un satélite que será lanzado al espacio? En caso de que sí conozcan nombres, compartan sus nombres e historias en el aula, en caso de que no, es un buen momento para investigar. Tenga en cuenta que los aportes de las mujeres van mucho más allá del campo de lo social, también están presentes en las ingenierías y en las ciencias.
- Prevenir la violencia basada en género
El respeto y la convivencia pacífica son elementos fundamentales de la educación en igualdad. Utilizar el conflicto puede ser una oportunidad para afrontar situaciones y crecer. Tener la confianza de expresar lo que le gusta y lo que no, contribuye a clarificar los límites de cada persona. En este sentido, es necesario tener en cuenta que la prevención de la violencia es un objetivo común en el que todos deben implicarse.
Escriba un cuento en el que un ser sin sexo o inanimado (una piedra, una nube, el viento, etc.), tenga una relación en la que la posesión, el control o algún tipo de violencia esté presente. Tras la lectura del cuento (que también se puede dramatizar) se les preguntará a niños y niñas qué no está bien en esa historia, cómo se sienten los personajes, cómo creen que debería ser el desenlace y finalmente, se les pedirá que transformen el cuento para que represente una relación de buen trato. El cuento puede analizar la posesividad, el control o el uso de la violencia entre compañeros y compañeras del mismo sexo.
(En fonología) Destrezas fonológica que consiste en distinguir los distintos “sonidos” o fonemas.
Se refiere a las diferencias biológicas entre hombres y mujeres, las cuales vienen dadas por los cromosomas, las gónadas, las hormonas y los órganos sexuales. Es la corporalidad, el funcionamiento y forma del cuerpo. Es algo innato, biológico, que cambia de forma y funcionamiento de acuerdo a la edad.
Son los pensamientos, sentimientos y comportamientos expresados dentro de un grupo particular, varía dependiendo de la cultura, la persona y la época
En el continuo de coaching es el rol de ser muy directo y enseñar, mostrar, guiar, etc.
Capacidad o disposición que ha desarrollado una persona para afrontar y dar solución a problemas de la vida cotidiana y a generar nuevos conocimientos. Es la capacidad para actuar de manera pertinente ante una situación compleja, movilizando de manera integrada los recursos necesarios para resolverla de modo adecuado.Tiene una doble dimensión: a) posesión de un conjunto de recursos o capacidades (cognitivos, de procedimientos y de actitudes), y b) capacidad para movilizarlos en una situación de acción.
Crecimiento o aumento en el orden físico, intelectual o moral.
Conjunto de experiencias, planificadas o no, que tienen lugar en los centros educativos como posibilidad de aprendizaje del alumnado. Una perspectiva tradicional acentúa el carácter de plan (con elementos como objetivos, contenidos, metodología y evaluación), frente a un enfoque práctico que destaca las experiencias vividas en el proceso educativo.
Conjunto de sonidos articulados con que el hombre manifiesta lo que piensa o siente (DRAE). Facultad que sirve para establecer comunicación en un entorno social, se le considera como un instrumento del pensamiento para representar, categorizar y comprender la realidad, regular la conducta propia y de alguna manera, influir en los demás.
Narración de las acciones que les suceden a unos personajes en un espacio y un tiempo determinados.
El género es un conjunto de valores, creencias e ideas sobre los comportamientos y actividades que en una determinada cultura son adecuados para las mujeres y los que son adecuados para los hombres, es decir, su identificación con la femineidad y con la masculinidad.
Son las ideas compartidas, generalizadas y distorsionadas por un grupo social sobre cómo son, cuál es el papel o a qué se dedican los hombres y las mujeres.
Un grupo de personas que trabajan hacia una meta común para el cual todos son mutuamente responsables.
Se refiere a la igualdad de derechos, responsabilidades y oportunidades de las mujeres y de los hombres y de las y los jóvenes. Significa que los derechos, las responsabilidades y las oportunidades de los hombres y de las mujeres no deben depender de su sexo.
Dar el apoyo necesario para que una persona o personas con menos oportunidades puedan estar a la par con los demás. Un sistema educativo es equitativo cuando trata a todos los alumnos como iguales, favoreciendo especialmente a los más desfavorecidos, como defiende Rawls, en una redistribución proporcional a las necesidades. Todos los alumnos deben tener garantizado el “currículum básico” indispensable al término de la escolaridad obligatoria, es decir, aquel conjunto de saberes y competencias que posibilitan la participación activa en la vida.