Tema 2. Desarrollo positivo juvenil: elementos fundamentales para el desarrollo de los adolescentes

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Indicadores de logro

  1. Comprende e identifica qué es el Desarrollo Positivo Juvenil y cuáles son sus elementos fundamentales.
  2. Describe cómo el Desarrollo Positivo Juvenil puede ayudar al éxito de los adolescentes.
  3. Describe y comprende cómo el Desarrollo Positivo Juvenil puede ayudar a descubrir las fortalezas y habilidades de los adolescentes.
  4. Comprende el modelo de las Cinco «C» de Richard Lerner.

1. Lea y reflexione.

Seguramente se está preguntando qué es el Desarrollo Positivo Juvenil. Antes de comenzar con esta sección, indique qué referencias o ideas tiene sobre el tema de Desarrollo Positivo Juvenil.

  • Escriba una lluvia de ideas y complete un cuadro como este (SQA).
S Q A
Lo que sé. Lo que quiero aprender. Lo que aprendí.

2. Escriba sus conclusiones.

Todavía no existe una definición precisa de qué es y qué implica el Desarrollo Positivo Juvenil.

No obstante, sí existe un consenso entre los teóricos sobre qué componentes debe abarcar este enfoque. Es más que un trabajo para especialistas o centros educativos: es una forma novedosa de entender el sistema educativo y de salud a favor del desarrollo de los jóvenes.

El Desarrollo Positivo Juvenil ve a los jóvenes como participantes activos por ser desarrollados y no como problemas que deben ser gestionados. Por lo tanto, el objetivo es proporcionar las oportunidades e instrucción para apoyar su crecimiento y desarrollo.

Desarrollo[editar | editar código]

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Origen y fundamentos del Desarrollo Positivo Juvenil[editar | editar código]

1. Lea y reflexione.

El Desarrollo Positivo Juvenil es tanto una filosofía como una estrategia de programación dirigida a fortalecer las competencias sociales, emocionales, morales y de comportamiento en adolescentes. Estudios de la organización estadounidense 4H revelan que programas de prevención que instruyen a los jóvenes sobre lo que no deben hacer tienen menos éxito a largo plazo que programas que destacan las fortalezas de jóvenes y que apoyan su desarrollo social, emocional, comportamental, y cognitivo.[1]

Con este contexto, ¿sabe cómo son los modelos de Desarrollo Positivo Juvenil?

Estos modelos se enfocan en el desarrollo humano y cómo los adolescentes crean relaciones dinámicas y sistémicas y, por lo tanto, de doble vía e influyentes. Este desarrollo tiene como punto principal la «plasticidad» que se mencionó anteriormente.

De esta manera, se alcanza el crecimiento y la mejora de la comunidad tomando en cuenta factores físicos, psicológicos, ecológicos, medioambientales, culturales e históricos.

El desarrollo es una constante ida y vuelta entre lo que el joven tiene y su contexto. Además, estudia las relaciones que se dan en el ambiente. El Desarrollo Positivo Juvenil es un enfoque que promueve diversas orientaciones sobre las formas en que la comunidad puede ayudar a los adolescentes a desarrollarse de manera sana, potenciando todas sus capacidades.

En las investigaciones que FHI 360 ha revisado, resalta la importancia del desarrollo positivo de la juventud, sus habilidades sociales y emocionales y cómo este conocimiento beneficia las prácticas de enseñanza y aprendizaje. La experiencia de FHI 360 demuestra los beneficios de integrar, resumir y abordar los intereses de los adolescentes.

A continuación, se presenta una adaptación del modelo de desarrollo positivo adolescente con base en el contexto guatemalteco. Además, se han podido determinar características clave del Desarrollo Positivo Juvenil, por ejemplo:

"Se centra en recursos, habilidades y competencias para alcanzar resultados: los recursos personales, familiares, escolares o comunitarios proporcionan el apoyo y las experiencias necesarias para el desarrollo positivo durante la adolescencia. Plasticidad cerebral: durante la adolescencia se producen cambios drásticos en el cerebro, sobre todo en el desarrollo de la corteza prefrontal, región del cerebro responsable de las funciones ejecutivas, como la planificación y la regulación de las emociones. Proporciona experiencias, apoyos y oportunidades: este es el mayor reto para la familia y la comunidad, pues deben promoverse las actividades sanas, alejadas de los vicios o las malas compañías.

Da importancia a los contextos ecológicos y sistémicos, ya que busca que los jóvenes se involucren en sus comunidades como un potencial de cambio y enriquecimiento.

Propicia un involucramiento a largo plazo y enfatiza el aspecto evolutivo. La socialización, la regulación de emociones y el desarrollo integral del adolescente se ven impactados por aspectos medioambientales.

Estimula la unión de estrategias, ideas, prácticas en distintas líneas del cuidado de la salud física, psicológica y social de los adolescentes y la participación de la familia y la comunidad.

También existen propuestas de diferentes autores e investigadores que apoyan el Desarrollo Positivo Juvenil, entre ellos el modelo de las 5 «C» de Lerner y el modelo de aprendizaje social y emocional (SEL).

Modelo de las 5 «C» de Richard Lerner[editar | editar código]

Richard Lerner, investigador de la Universidad de Tufts, ha creado un modelo para describir los resultados del Desarrollo Positivo Juvenil.

Este modelo contiene diversos componentes cognitivos, sociales y conductuales y comprende cinco características en el individuo: competencia, carácter, conexiones, confianza y cuidado y compasión. Estos cinco componentes llevan a reconocer un sexto componente: la contribución.

Las 5 «C» del Desarrollo Positivo Juvenil
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Conozca el significado de cada característica de las 5 «C»[editar | editar código]

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Lerner (2004) indica que cuando un joven manifiesta las 5 «C» también presenta una sexta «C»: «contribución». Esto significa que el adolescente contribuirá de manera beneficiosa a la familia, la comunidad, a la sociedad civil y a sí mismo.

Estas características positivas, denominadas fortalezas, también son recursos para promover el desarrollo positivo de la juventud. Se pueden desarrollar en las familias, las escuelas, las instituciones religiosas, las organizaciones de jóvenes, y la comunidad en general.

Otros investigadores, como Scales, Benson, Leffert y Blyth (2000), comprueban que los adolescentes que gozan de un mayor número de recursos presentan un desarrollo más saludable y positivo que se pone de manifiesto en algunos indicadores como el éxito escolar, conductas prosociales, el cuidado del cuerpo, la salud, la evitación de riesgos y la superación de la adversidad.

Por lo tanto, aquellos que poseen un alto nivel de desarrollo positivo están más satisfechos con la vida y tienen menos problemas de conducta.

Por su parte, Ceja, Ramírez, Sánchez y Gómez (2013) consideran que lo más importante al estudiar el desarrollo juvenil es saber cómo se puede mejorar ese potencial de manera individual y grupal, cómo conocer los métodos más factibles para corregir deficiencias, suplir carencias y definir áreas de oportunidad, entre otros.

También es importante descubrir la manera en la que los jóvenes pueden alcanzar su máximo desarrollo con base en sus capacidades individuales, sociales, intelectuales, culturales, académicas y emocionales para hacer frente a diversas situaciones que se presenten en su vida cotidiana. Se trata de que los adolescentes tengan las competencias necesarias y dispongan de las debidas oportunidades para que puedan contribuir efectivamente al desarrollo, en primer lugar, en forma individual y, posteriormente, al de sus familias y comunidades.

Cierre[editar | editar código]

Ejercicios del tema[editar | editar código]

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Ponga en práctica lo que ha aprendido.

  1. Realice una actividad de autoevaluación donde exponga qué ha aprendido y cómo puede mejorar lo relacionado con el aprendizaje del tema de Desarrollo Positivo Juvenil.
  2. Explique con sus palabras qué es el Desarrollo Positivo Juvenil.
    • ¿Qué disciplinas participan en el Desarrollo Positivo Juvenil? ¿Qué rol tengo yo?
  3. Ejemplifique, con situaciones de la vida cotidiana, cómo puede ayudar a descubrir las fortalezas y habilidades de los adolescentes.
  4. Dé un ejemplo de cómo se ponen de manifiesto las 5 «C» de Lerner en el Desarrollo Positivo Juvenil.
    • Ponga en práctica lo que ha aprendido y vea cómo se manifiesta en el día a día dentro del salón de clases.
    • ¿Cómo apoya usted o su comunidad para que los jóvenes desarrollen las 5 «C»?
    • ¿Cómo puede mejorar para tener un mayor impacto?
  5. Elabore un esquema con las 5 «C».
    • Utilice cartulinas de colores y fotos de los estudiantes.
    • Colóquelo en una pared del salón de clases.

Referencias[editar | editar código]

  1. Catalano, et al., 2002.

Crecimiento o aumento en el orden físico, intelectual o moral.

Perteneciente o relativo al conocimiento. La dimensión cognitiva está formada por conceptos como construcciones o imágenes, que representan la realidad mediante clases o categorías. Está formada igualmente por un conjunto de procesos (percepción, memoria, lenguaje, pensamiento). A nivel más abstracto, también los principios, que relacionan o ligan determinados hechos o conceptos de un modo determinado.

Espacio vital en el que se desarrolla el ser humano. Conjunto de estímulos que condicionan al ser humano desde el momento mismo de su concepción.

Término introducido por Le Boterf, entendido como los conocimientos, procedimientos y actitudes que es preciso emplear para resolver una situación. Unos son recursos internos, que posee la persona, tales como conocimientos, procedimientos y actitudes

Destrezas fonológica que consiste en juntar fonemas o sílabas para formar una palabra.

Proceso en que los estudiantes participan en la evaluación de su propio proceso de aprendizaje y determinan de manera consciente qué pueden y qué no pueden hacer.